Recomiendo para los que aman lo histórico

El bar era increíble, beber en el mismo lugar donde los rough riders estuvieron fue surrealista. disfruté muchísimo de un masaje en el spa, Olga es la mejor, de verdad me dejé llevar y fue lo más relax que he experimentado.

No fue barato, pero aún así vale la pena.

Encanto histórico y buena comida

Me encantó la atmósfera del lugar, es como un viaje al pasado. La habitación era cómoda y espaciosa. Disfrutamos mucho del desayuno en el bufé, ¡sobre todo el café! A veces había algo de ruido en los pasillos, lo que interrumpía un poco la tranquilidad, pero nada que arruine la experiencia. ¡Definitivamente vale la pena!

Nuestra estancia fue increíble. La ubicación era perfecta, ya que estábamos a solo unos pasos del famoso Álamo y del encantador River Walk, lo que facilitó nuestros paseos familiares. Además, el ambiente histórico del hotel nos envolvió, con un diseño arquitectónico del siglo XIX que encantó tanto a los adultos como a los niños. La piscina era enorme y perfecta para que los más pequeños se divirtieran después de un día de exploración. Disfrutamos de un desayuno buffet variado que agradó a todos, desde frutas frescas hasta platos tradicionales.

Sin embargo, la limpieza de nuestra habitación fue inconsistente, lo que fue un poco decepcionante.

El lugar tiene una historia fascinante y una sensación increíblemente vintage. ¡No te pierdas el helado de mango en el bar!

me sentí muy afortunado, no me puedo quejar

Experiencia histórica en el hotel, localización frente al Álamo, encantador jardín en el patio.

Las paredes son tan delgadas que puedes escuchar a tus vecinos como si estuvieran en la misma habitación!!! La limpieza es muy inconsistente, un día te dejan el cuarto impoluto y al siguiente parece que no han pasado. ¡Eso podría mejorarse!!!

Alojarme en un hotel museo histórico fue una experiencia única, con una arquitectura hermosa y un ambiente encantador. ¡La piscina era perfecta para relajarse después de un día explorando!

Eso sí, el ruido de los vecinos hacía que me sintiera como en una obra teatral.

El bar es increíble, beber en el mismo lugar donde los rough riders estuvieron fue surrealista. Las habitaciones son pequeñas y se siente un poco de ruido de la calle. Hicimos un recorrido a pie cercano, aprendimos mucho sobre la historia del lugar.

la piscina es enorme y brinda diversión familiar, pero puedes oir a los vecinos.

recomiendo este lugar insistentemente for un momento fugaz,

hermoso hotel, encantadora ubicación, disfruté del servicio del bar junto a la piscina donde pudimos relajarnos después de un ajetreado día explorando el área y el desayuno buffet lleno de opciones deliciosas fue un gran comienzo para nuestras mañanas.

La estancia ha sido fantástica

Mi habitación era un tanto pequeña y no tenía muchos detalles interesantes. La cama era cómoda, pero la limpieza dejaba que desear, con cosas viejas y un poco de polvo. La moqueta estaba sucia y la ropa de baño se veía bastante gastada. Sin embargo, el encanto histórico del hotel es innegable, además que desde mi habitación tenía una vista agradable del parque cerca del Álamo, lo que lo hacía algo especial.

Disfruté mucho de mi estancia de seis noches, en especial por la cercanía a lugares históricos como El Álamo y el Riverwalk. A pesar de algunos problemas con la limpieza de la habitación, poder alojarme en un hotel con tanta historia fue una experiencia única. Sin embargo, me desagradó el olor en la zona de las habitaciones y las dificultades con la calefacción en noches frías. En general, la estancia fue agradable, pero hay detalles que podrían mejorar.

mi esposa y yo disfrutamos mucho de nuestra estancia en este hotel histórico. la habitación tenía un encanto especial con detalles antiguos y estaba justo frente al álamo, lo que hizo que nuestros paseos nocturnos fueran mágicos. definitivamente superó nuestras expectativas.

el sistema de calefacción no funcionó bien.